En noviembre culminó con éxito la afinación final del ingenioso modelo de ingeniería de la D-OBC (Development On Board Computer), un logro que nació de la colaboración entre CONAE y VENG.
Este nuevo desarrollo tiene algo especial que queremos compartir con ustedes: su increíble versatilidad para desempeñar el papel de cerebro electrónico en el módulo de carga útil de diversos satélites.
La D-OBC es como el director de una orquesta, pero en este caso, dirige los instrumentos científicos que recolectan datos cruciales en cada misión satelital. Trabaja como “corazón” de la carga útil del satélite, asegurándose de que todo funcione a la perfección para brindarnos información valiosa desde el espacio.
Para Nicolás Balbi, Ingeniero en Telecomunicaciones y responsable del Proyecto de D-OBC dentro de la Dirección de Proyectos de la Gerencia de Proyectos Satelitales e Industriales, “la D-OBC es un gran desafío que afrontamos. Significó un esfuerzo considerable de dos años y medio de trabajo, en los que se han involucrado todas las áreas de trabajo transversales de la empresa”.
Este logro no solo es un hito tecnológico, sino también un motivo de orgullo para todos nosotros. Para Nicolás, como colaborador de la empresa desde hace más de 6 años, fue “un proyecto complejo, desafiante y diferente a lo que venía realizando” como lo fueron las misiones SAOCOM.
¡Estamos dejando nuestra huella en la exploración espacial! Entre todos, sigamos contribuyendo con nuestras capacidades y dedicación.
¡Felicitaciones Nicolás y equipo!